
“El que no lee, a los 70 años habrá vivido solo una vida. Quien lee habrá vivido 5.000 años. La lectura es una inmortalidad hacia atrás” “Leer alarga la vida. Quien no lee sólo tiene una vida y, se los aseguro, es poquísimo. En cambio, nosotros, cuando moriremos, nos recordaremos haber atravesado el Rubicón con César, combatido en Waterloo con Napoleón, viajado con Gulliver y encontrado a enanos y gigantes. Una pequeña compensación por la falta de inmortalidad”.